Gracias a los esfuerzos del senador medioambientalista Gaylord Nelson, el 22 de abril de 1970 fue un día histórico, ya que millones de personas en Estados Unidos se volcaron a las calles, parques, y espacios públicos para manifestarse a favor de un ambiente saludable. A partir de ese momento se instauró esta fecha como un día de reflexión, y se comenzó a dar prioridad a la sustentabilidad y medio ambiente, lo que dio lugar a instancias de concientización, como la creación de la Agencia de Protección al Medio Ambiente de Estados Unidos y a la aprobación de leyes y tratados relacionados con la calidad del aire, el agua y la conservación de especies en peligro de extinción.
En este contexto, la carrera de Geofísica de la Universidad de Concepción conmemoró el día con una actividad científica – ambiental realizada el pasado viernes 22 de abril en la Escuela Sergio Martín Álamos, de la comuna de San Nicolás (ubicada al noroeste de la ciudad de Chillán), donde monitoras de la carrera se hicieron presente para dictar el taller “La Tierra un planeta inquieto”, que fue presenciado por niños y niñas de entre quinto a octavo básico, quienes pudieron participar de una lúdica charla donde aprendieron acerca de Terremotos y Tsunami, repasando la propagación de estos fenómenos, y la relación que existe entre ellos, junto con algunos conceptos asociados, como hipocentro, epicentro y placas tectónicas. También revisaron y discutieron sobre la naturaleza de estos fenómenos en nuestro planeta, revisando videos y animaciones, y participando de un sencillo experimento que les ayudó a comprender gráficamente el proceso de convección.
“Nuestra escuela tiene excelente rendimiento, por eso siempre estamos buscando nuevas oportunidades de desarrollo para los niños”, comentó la profesora coordinadora de la actividad, Violeta Silva, quien agradeció y valoró la vocación de las alumna de Geofísica Bernardita Jorquera y Macarena Lopetegui, quienes se dieron tiempo para trabajar con los niños, explicar sus dudas, y conversar acerca de otros fenómenos del planeta.
Cabe destacar que Violeta y otros profesores, a diario enfrentan el desafío de incentivar a sus alumnos en el ámbito científico, ya que en agosto del año pasado un incendio de grandes proporciones destruyó la mitad del establecimiento, acabando también con un laboratorio completamente equipado, donde los alumnos realizaban sus clases de ciencias. Actualmente, la escuela se encuentra en etapa de reconstrucción, lo que de acuerdo a la profesora, no ha afectado el excelente rendimiento de su cuerpo escolar, que se vio reflejado en el último Simce publicado, donde los estudiantes de cuarto básico (que rindieron la prueba a fines del año 2014), superaron el rendimiento alcanzado por importantes colegios particulares y subvencionados de la comuna de Chillán.
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